Hoy te voy a plantear una situación, que habla de la gestión emocional para la conciliación familiar en sanitarios.
Como enfermera, sufres muchos de los factores que hacen difícil lograr la conciliación familiar: trabajar a turnos, cambios en los horarios, escaso tiempo de antelación con que se informa de estos cambios, trabajar los domingos y los sábados, o por la noche.
Esto tiene un coste emocional que hay que gestionar.
En este artículo te hablo de cómo la tensión constante entre las exigencias del puesto de trabajo, y los cuidados familiares y personales, hace más necesaria la gestión emocional para la conciliación familiar en sanitarios.
Aspectos que impulsan a la conciliación familiar en sanitarios
Puede que tengas un turno de trabajo aparentemente “cómodo”, con horario estable, o puede que en tu caso cambies con frecuencia de horario, porque no tienes esa estabilidad.
En cualquier caso, te encuentras muchas veces ante la situación de tener que dejar a tus hijos, para ir a trabajar. Te pierdes muchos momentos de su infancia, sin poder participar de su vida escolar (asistir a reuniones de colegio, participar en jornadas especiales como el día de libro, celebración de fiestas navideñas, carnaval,..)
Tener que dejar a tus seres queridos para ir a cuidar a desconocidos
A veces sales de tu casa, dejando a tus hijos, que tanto quieres, al cuidado de otras personas, para ir a tu trabajo a cuidar a personas desconocidas. Sin querer te lo quedas pensando, y sin poder evitarlo, te va dejando dentro un poso de amargura , impotencia y frustración.
Otra cosa que te afecta es cuando ves la cara de decepción que se les queda a las personas de tu entorno cercano cuando no puedes participar de ciertos momentos importantes, como cenas familiares, cumpleaños, fiestas, o eventos importantes.
Empiezas a sentirte mal. Es el momento de pensar en la gestión emocional para lograr la conciliación familiar.
Al elegir tu profesión, desconocías a lo que tendrías que renunciar
Elegiste ser enfermera, sin saber que eso iba a significar renunciar a una parte tan importante en tu vida, y haces lo que puedes para aceptarlo como parte de tu profesión. Te sientes orgullosa de ayudar y ser útil a personas que realmente lo necesitan, por encontrarse en momentos bajos de su vida.
Pero llevas contigo el dolor de tus seres queridos, que también te necesitan y tienen que quedarse sin tus atenciones.
A veces sientes como si tuvieras que elegir entre tu profesión y tu vida, y esto te rompe el alma
Con el tiempo, te comprenden
Con el tiempo tus seres queridos, sobre todo los más pequeños, van comprendiendo las circunstancias de tu trabajo, incluso te admiran por el sacrificio que haces, y te ayudan a sentirte me mejor.
Pero por dentro acumulas una serie de emociones produciéndote malestar, y es importante tenerlo en cuenta y acordarte de gestionarlas.
La gestión emocional ayuda a la conciliación familiar
Gestionar las emociones conlleva:
Cuando los sanitarios gestionan sus emociones todo les es más fácil
Gestionar las emociones es no desconectarte y relegar el mundo emocional a un segundo plano en el que quedan desatendidas. Si te desconectas de tus emociones, tú misma quedas desatendida y desconectada de tus necesidades.
La gestión emocional implica expresar de forma auténtica lo que sientes encada momento. Si expresas algo diferente a lo que sientes, sin querer, te creas confusión emocional interna, que a su vez confunde a los que te rodean.
La mala gestión emocional, provoca confusión en ti y a tu alrededor.
Gestión emocional de emociones auténticas
A veces expresas algo diferente a lo que sientes. De esa manera te ocultas, las personas que te rodean tienen más difícil comprenderte, y esto aumenta los problemas cuando quieres gestionar tus emociones para la conciliación familiar.
Las emociones que expresas cambiadas, se pueden llamar sustitutivas, porque sustituyen a las que sientes de verdad.
ASPECTOS | EMOCIONES AUTENTICAS | EMOCIONES SUSTITUTIVAS |
---|---|---|
ADECUACION CUALITATIVA | La respuesta emocional es adecuada y coherente con el estímulo que la desató. | NO es coherente. Por ejemplo quien tenga prohibida la tristeza puede contar chistes y reír en un duelo. |
ADECUACION CUANTITATIVA | La respuesta emocional es proporcionada al estímulo que la desató. | Es desproporcionada. Generalmente mucho más intensa que el estímulo. Ejemplo: Rabia intensa por algo nimio. |
DURACIÓN | Se siente "aquí y ahora" y por ello los sentimientos se suceden a la par de las situaciones. | No tienen una duración adecuada a la situación. Generalmente son largas y persistentes. |
CONTAGIO | Invitan a que otra persona (sana) sienta la misma emoción u otra complementaria (ej.: Tristeza auténtica invita a tristeza y afecto) | El observador (sano) la ve como artificial, teatral, forzada o exagerada. |
HISTORIA PERSONAL INFANTIL | Alegría y el afecto eran compartidos. Miedo y tristeza daban lugar a ser protegidos. La rabia era permitida y comprendida | La alegría y el afecto no se exteriorizaban o se descalificaban. El miedo y la tristeza daban lugar a caricias de lástima y/o se ridiculizaban. La rabia daba lugar a alborotos intensos. |
Ventajas de la gestión emocional para la conciliación familiar
Tener claro que estás expresando lo mismo que estás sintiendo, ayuda a que los de tu alrededor te entiendan mejor, y sean más tolerantes con las dificultades de tu trabajo.
La gestión emocional es uno de los recursos más valiosos que tienes para afrontar retos como los reproches de tus hijos pequeños, cuando no quieren que te vayas a trabajar porque vas a faltar a la presentación de su trabajo escolar. Las llantinas que cogen cuando finalmente no puedes cumplir si habías prometido ir con ellos y en el último momento te llaman para ir a cubrir el puesto de una compañera.
Dejarás de perderte lo mejor
A veces te tienes que ir a trabajar en lo mejor de una celebración porque entras en el turno de la noche, y ya no puedes seguir disfrutando, ni los demás de ti.
Sabes que es tu trabajo, pero te cuesta acostumbrarte a esa sensación de ir al revés que el resto de los mortales.
Estrategias de gestión emocional para la conciliación familiar
Gestiona la culpa
Habla con tus seres queridos, dales abiertamente la mayor información posible para hacer tu planificación de actividades con ellos. Deja claro, sobre todo a los más pequeños, que los planes hechos pueden cambiar. Enséñales a adaptarse a los cambios sin frustración. No prometas lo que no tienes certeza de poder cumplir, por ti misma. No te sientas mala madre si tienes que ausentarte o decirles un no. Háblate con comprensión y con realismo, vigila y corta tus pensamientos autocríticos.
Contentarles con una promesa te pone en riesgo de que puedan decepcionarse si tus circunstancias cambian.
Usa la comunicación asertiva
- Claridad: evita ambigüedades y comparte las dificultades concretas.
- Concreción: evita irte por las ramas en la conversación y ser abstracta.
- Cortesía: evita la agresividad o el tono de enfado ya que el tono es lo que hace que tu familia sea receptiva a lo que le estás diciendo.
Gestiona la ansiedad por separación
De vez en cuando, reúne a tu familia y explica de nuevo tu situación y tus horarios. Tú los tienes muy claros, pero ellos no. Recuérdales por qué les gusta que hagas tu profesión. También es importante que tengan clara esa parte.
Gestiona la independencia
Educa a las personas de tu entorno para que sean autónomos e independientes. Lo que sientes por ellos, no está condicionado por los espacios o eventos que no puedes compartir. Deja muy claro, sobre todo a los más pequeños que ellos no tienen ninguna responsabilidad en el hecho de no poder estar con ellos más tiempo.
Gestiona el miedo
No te vengas abajo temiendo que por no estar te van a dejar de querer, o te van a castigar emocionalmente. Haz que tu entorno sea comprensivo contigo, siendo comprensiva contigo misma.
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Gestiona la decepción
No pases demasiado tiempo lamentando lo que no puedes hacer y busca alternativas. Haz que el tiempo que compartas sea de verdadera calidad, y que les llene con plenitud. Eso aumenta la capacidad de tolerancia, para cuando no puedes estar.
Implica a todos en la creación de las nuevas rutinas. Interésate por hacer que los demás sepan tus gustos, y tus posibilidades, para que el hecho de adaptarse sea compartido, y no sea solo una tarea tuya.
Gestiona tu frustración
Muestra una buena actitud ante lo que no llegas. Enseñarás a los que te rodean a hacer lo mismo.
Gestiona la autoexigencia
No tienes que ser ni super mamá, ni super esposa, ni super enfermera. Admite cuando no puedes y pide ayuda. Los demás están deseando ser útiles muchas más veces de las que te piensas. Acepta esa ayuda sin juzgarla, y sin poner pegas a como hagan las cosas.
Gestiona tu impaciencia
Ten paciencia contigo mismo. A veces hace falta tiempo para que los demás y tú misma te acostumbres a tu situación. Si te aparecen cambios de humor, alteraciones del sueño, falta de apetito, cansancio…ten paciente contigo y con los demás.
Normaliza tus sensaciones, no las lleves al drama, a veces los procesos precisan su adaptación, pero antes tienes que aceptarte con tus limitaciones. Es importante que cada miembro de la familia encuentre espacios que le hagan sentirse reconfortado ante momentos de dificultad. Hazte muy consciente que no estás sola, y muéstralo.
Gestiona la rabia
No te lamentes por lo que no puedes compartir. Deja pasar los momentos amargos, con compasión y ponles amor, para que no te hieran internamente, de manera grande.
No te compares con tus compañeros, que pueden hacer esto o aquello. Pensar que te tratan con injusticia, no te ayuda a ver con claridad.
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Una buena gestión emocional ayuda a reforzar los vínculos
Hacer una buena gestión emocional para la conciliación familiar en sanitarios supone darse la oportunidad de reforzar los vínculos familiares. Llevar a cabo acciones que te hagan conocerte mejor, porque cuanto más te conoces y más abierta estás a tus emociones, menos obstáculos encuentras en las iniciativas que tomes para lograr esa conciliación familiar,
Algunas técnicas de gestión emocional para la conciliación familiar
Escribe lo que sientes: descarga en el papel los sentimientos dolorosos que tienes. Evitarás descargarlos contra las personas que quieres.
Escribe lo que piensas: cuando lo escribes y después lo lees, te das cuenta de si es desproporcionado respecto a la situación, de si has exagerado, de si es un pensamiento irracional, sin sentido. Al hacerlo te das la oportunidad de rectificar, sin dejar que vaya a más.
Libera la tensión de tus emociones no gestionadas
Pasea o haz deporte: aprovecha el desgaste de la actividad física para soltarla.
Haz tapping EFT: golpea suavemente algunos puntos concretos en el cuerpo donde se estancan las emociones, para desbloquearlas.
Educa, obliga a tu mente a enfocarse en las cosas que te hacen sentir bien.
Pon tu atención del día a día en el presente, Acostúmbrate a dejar atrás el pasado.
Cada día tienes una nueva oportunidad para volver a hacer las cosas como las sientes
¿Qué situación te produce más quebraderos de cabeza para gestionar tus emociones y lograr la conciliación familiar? Déjame tu comentario.
Si este tema te parece interesante y crees que el trabajo terapéutico con las emociones te puede beneficiar, no dudes en contactar conmigo. Ofrezco terapias presenciales y online.
Un abrazo
Ana Eló